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“Hace dos años fui despedido. El Presidente de la Compañía me lo comunicó a través de una conversación vía Skype. La comunicación no era muy buena y el contexto tampoco. Recibí la indemnización y me fui a mi casa. No hubo tiempo para reflexionar. Tengo 59 años y llevo 2 años con algunos trabajos esporádicos, cada vez más esporádicos. Debo emprender, no tengo otra opción y no sé cómo hacerlo ni por dónde comenzar”
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“Durante los últimos 6 meses antes de mi renuncia comenzaron a dudar de mis competencias, había burlas, ironías. Tengo 72 años y empecé yo mismo a dudar de mis capacidades. En cada reunión mi autoridad se desplomaba, parecía que todos estaban de acuerdo en que yo no servía y tenía que irme. Sólo que nadie se atrevía a hacerlo, entonces me forzaron a hacerlo y yo lo acepté, estaba destruido en cuerpo y alma.
Fue un alivio… y un desafío a una edad en que me doy cuenta que las posibilidades casi no se ven”
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“Tengo trabajo, un muy buen trabajo y hace años vivo muy tranquila en ese aspecto. Ayer una compañera me preguntó si he pensado jubilar. En realidad nunca lo había pensado y es una conversación que no quiero tener… todavía. Cumplí 60 años recientemente y siento que algo grande cambió en mí”
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“Estoy jubilada y ya he descansado lo suficiente, deseo una actividad. Necesito conversar, poder entregar lo que sé a otros más jóvenes, aprender de lo nuevo. Me da terror pensar que puedo ser una carga para mis hijos”
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“El futuro no es lo que viene, es lo que vamos a construir”
Rondando los 60 años, el impacto de la edad aparece abruptamente, por eso asusta tanto. Esto es independiente de si estamos o no trabajando o si estamos tranquilos o estresados. La emoción de la edad nos cruza a todos por igual.
A partir de esta edad, comienza tal vez la última recta que recorreremos en condiciones físicas aceptables. Aún es tiempo para construir nuestro futuro.
El Taller Exploratorio Seniors, dirigido a la gente “grande y sabia” es un encuentro de un día en que juntos reflexionamos, descubriendo y compartiendo lo que nos está pasando individualmente, laboralmente, familiarmente, socialmente… en un nuevo mundo que antes lo escuchábamos a lo lejos: la que llaman Tercera Edad.
Esa edad en que los símbolos que la representan son siluetas de ancianos con bastones, apenas autovalentes. La falta de sensibilidad de los autores sólo se justifica porque esos creativos no pertenecen a nuestra edad y tienen un juicio equivocado de nosotros que debilita nuestra dignidad.
Lo que los más jóvenes suponen nosotros ya lo estamos viviendo y es muy diferente a lo que nosotros, cuando estábamos más jóvenes, suponíamos.
Esto demuestra también la necesidad de acercarnos entre las diferentes edades. Ese diálogo entre la energía y la sabiduría sólo podría dar buenos resultados.
Cada año que va pasando, los mayores de 60 años se van incrementando. En realidad somos el segmento etario de mayor incremento anual desde ya hace varios años. Muy pronto seremos mayoría y si somos sabios y honestos podemos ayudar a gobernar, o al menos a gobernarnos a nosotros mismos en ésta nueva etapa de la vida.
En nuestros talleres exploratorios trabajamos juntos reflexionando en nuestras necesidades y deseos, nuestros dramas e historias comunes y en las posibilidades que descubrimos. Muchos sabemos muy bien lo que necesitamos pero nunca reflexionamos en qué es lo que realmente deseamos, cuáles son nuestros sueños. Hay mucha vida por delante.
Esto lo dijo Picasso:
“Se necesita mucho tiempo para llegar a ser joven”
Próximo Taller Exploratorio: 5 de Mayo
Más información:
Inscripciones:
TALLER EXPLORATORIO PARA GENTE GRANDE Y SABIA
Si tienes 60 o más…
¡Bienvenido a Seniors!
Jorge Olalla Mayor 
Estoy por cumplir 29 años, y creo que la edad es una situación que comenzó a preocuparme desde que pase los 25. Se que suena tremendamente tonto, porque cualquiera diría que soy una persona joven. Sin embargo, creo que la preocupación por cumplir años se manifiesta en cualquier etapa de la vida. Saludos
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